Two Men in Fog, 1958 - FRED HERZOG
Tú eras mi radiante luz
y yo tu ardiente sombra
en el horizonte del mediodía.
Tu luz era tan blanca
que cegaba mi retina
cuando te contemplaba.
Mi sombra era tan densa
que era capaz de abrazar
y abrigar tu aliento.
Ahora sólo soy como el claroscuro,
que va disolviéndose lentamente
entre la fragilidad de tu niebla.
Hoooola:
ResponderEliminarAmigo mio, el claroscuro siempre permanece enmarcado.
Abrazos y ¿nos vemos en Zaragoza?
Un claroscuro perfecto, Noray. Es sabido que la sombra no existe sin la luz, y tú consigues que uno/a sienta cómo van desapareciendo ambos en la fragilidad de la niebla.
ResponderEliminarMe fascinó la idea del poema y me fascina tu forma de plasmar en verso la intensidad de una emoción.
Un abrazo.
Luces y sombras,
ResponderEliminarno hay una sin
la otra para habitar
el clarooscuro.
Un cálido abrazo.
Cuanta inspiración en tus letras.
ResponderEliminarCuanta belleza nos acercas en este día.
Gracias por compartirla con todos nosotros.
Cálido abrazo.
Ella era la eterna ilusión inspiradora. Muy bueno. Abrazos.
ResponderEliminarQué bello ser niebla para penetrar por cada rendija de tu puerta...
ResponderEliminarentre luz y sombra
ResponderEliminarel frágil puente
de un horizonte
que brumoso
se disuelve
un abrazo
La luz de tu bendita tierra; muy bonito, Noray.
ResponderEliminarUn abrazo.
un poema hemoso, luces y sombras.
ResponderEliminarUn abrazo
Bello poema a media luz...
ResponderEliminarUn abrazo
Hola, Noray:
ResponderEliminar¡Cuántas veces somos sombras! ¡y cuántas luz! y a veces una mezcla de todo ello, entre luz, entre sombras, disolviéndonos en llantos o en nuestros propios actos.
Siempre es un placer leerte, Noray, tus versos son preciosos.
Un beso.
Cuando la luz queda convertida en frágil niebla, sólo quedan suspiros para refugiarse en ellos.
ResponderEliminarBello poema, querido amigo.
Un abrazo.
La sombra depende más de la luz que del cuerpo interpuesto.
ResponderEliminarNo es extraño que con la niebla acabe difuminándose.
Un abrazo.
Amigo este poema me parece maravilloso.
ResponderEliminarLos tres últimos versos me dejas fascinada.
Un abrazo y buen fin de semana.
Amigo Noray, si te disuelves, que sea en la verdad y en la luz. Te necesitamos. Un abrazo.
ResponderEliminarMe hiciste pensar en Neruda..
ResponderEliminarHermosa tú.. yo altivo,
acostumbrados uno a arrollar..
el otro, a no ceder..
la senda estrecha..
inevitable el choque..
y ahora cambiemos los finales..
sshhh..
Bellísimo poema Noray, la luz y las sombras, dispares e indisolubles abrazándose en tus versos como apasioandos amantes y debatiéndose entre el anhelo de unión y la irreconciliable distancia.
ResponderEliminarMe ha encantado.
Besos
Narci
Me encanta leerte, ese poder de nostalgia, melancolía tan bien trabajada me sorpende, tenes un don increible... gracias mil gracias por compartirlo con nosotros tus lectores... a tus pies poeta.
ResponderEliminarcariños.
maukkkkkkkkkkkkkkkkkkkkkkkk
Leerte siempre es un lujo poeta..
ResponderEliminarPerdón por mi ausencia siempre es un gusto visitarte..
Un abrazo
Con mis
Saludos fraternos de siempre..
Que tengas un buen fin de semana...
Enlluernava veure-us
ResponderEliminartant contraposats,
antagònics,
però a la vegada perfectes
en la vostra entrega.
El temps,
amic vostre com jo,
us ha fet la malifeta
de la rutina
que distorsiona les passions,
i ara us heu sotmès
al difuminant
desballestament
de la vostra relació.
No us en adoneu,
però,
encara és ella la radiant llum
que et fa l’ombra més ardent,
tant sols,
que no us en adoneu.