Incendio y fuego de noche, 1793 - FRANCISCO DE GOYA
Los ojos cegados por el tiempo
contienen todas las aguas de los océanos,
abarcan las infinitas luces
y alumbran las mil y una respuestas
que han quedado flotando en el viento.
Solo somos lo que divisa la mirada,
sin más dolor que la palabra,
sin más gozo que el silencio,
aunque sigan ardiendo preguntas
en el eterno fuego del abismo.