“Soy el que es nadie, el que no fue una espada
en la guerra. Soy eco, olvido, nada.”


JORGE LUIS BORGES

sábado, 5 de abril de 2008

Amor envenenado


Los amantes, 1928 – RENÉ MAGRITTE


El amor desfiló a nuestro costado
y al separarse abrasó y desgarró nuestros labios.
Los dejó entreabiertos, con una sonrisa leve
descolgándose hasta nuestros manos.
Nos abandonamos, y nuestros cuerpos
recordaban a pétreas lágrimas
de polvo seco y descuidado.

Cada tarde,
cuando los orfeones del viento
cantaban la muerte del sol,
nuestros ojos se quebraban
como una ola contra el acantilado.

La noche nos disponía un amargo despertar,
y entre susurros y miradas 

nos propusimos otro brindis.
Enarbolamos las copas entre nuestros dedos
y sorbo a sorbo saboreamos aquel licor
hasta la agonía.

Escuchamos un grito estremecedor
inundando nuestros anhelos.
Nos habíamos prometido amarnos para siempre
y aquella copa, con su último sorbo,

nos envenenaba con una sutil y agria despedida.