Sauces al atardecer, 1888 - VINCENT VAN GOGH
Tu boca de tiernos y dorados trigos
se arrulla en mi boca de agrios naranjos
Tu boca de tiernos y dorados trigos
se arrulla en mi boca de agrios naranjos
y florece al alba sobre el horizonte de mis labios.
La luz de tus ojos, henchida de primavera,
enciende el invierno de mi mirada,
cuando comienza el sueño y acaba otra jornada.
enciende el invierno de mi mirada,
cuando comienza el sueño y acaba otra jornada.
Eres el silencio encarnado en la palabra,
el oasis florecido y la fruta ya madura
el oasis florecido y la fruta ya madura
en mi ardiente memoria.
Eres la espesa arboleda,
la única y auténtica bandera.
Eres la verdadera estrella
en la noche de mi isla.
la única y auténtica bandera.
Eres la verdadera estrella
en la noche de mi isla.