“Soy el que es nadie, el que no fue una espada
en la guerra. Soy eco, olvido, nada.”


JORGE LUIS BORGES

domingo, 27 de abril de 2008

Fuego


Fuego, 1999 - MUÑOZCOLOMA


Un diluvio de incandescentes cenizas
se derrama en el perihelio
como torrencial catarata
sobre el rectilíneo horizonte
y un idilio de espumas
brota en surtidor
en los heridos azahares.

Cirios encendidos,
en la quilla de acero
de la marea granate,
desnudan lunas de azafrán
mientras en la ardiente arena
una caracola de palabras
arde bañada en sangre.

Nubes de azul plomo
aran el encarnado firmamento
con racimos de corales
y en tus solaces labios
nacen cuchillos de hielo
que podan las raíces
de las arboledas siderales.

Columnas de fumarolas
emergen de los jameos
y siembran pétalos de estrellas
que engalanan mis versos,
dejando desnuda en la frente
los senos de una amapola
que se deshoja en los espejos.

Colmenas de lágrimas de fuego
fermentan en los cristales
de las frágiles lilas,
que junto a tu boca crecen
en eterna sístole contenida,
para asolar los eternos girasoles
que florecen en mis sienes.