The Poet, 1911 - EGON SCHIELE
Nunca tuve miedo
a dejar mi propia huella,
aunque sé que mi cuerpo
no proyectará más sombras.
Sólo me queda el silencio,
unas cuantas palabras rotas,
y escribir dos o tres versos
para un poema sin final.
a dejar mi propia huella,
aunque sé que mi cuerpo
no proyectará más sombras.
Sólo me queda el silencio,
unas cuantas palabras rotas,
y escribir dos o tres versos
para un poema sin final.