Figuras desnudas, 2003 - CARRUÇOMi corazón,
enfermo y deshecho
en la conciencia
de un absurdo espejo,
flota sobre tu mar
lívido y muerto.
Tu corazón,
herido y doliente
en la memoria
de horas abandonadas,
sangra en las vidrieras
de mi alma.
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tu poema: un precioso círculo de herida perfecta.
ResponderEliminarun saludo.
Es un poema relamente bonito,
ResponderEliminarlas vidrieras de mi alma estan empañadas tambien y chorréan nostalgia todo el tiempo.
Un beso,
ana
Camille
ResponderEliminarGracias por el comentario.
Los corazones terminan resistiendo aunque sangren.
Saludos
Ana
ResponderEliminarLa nostalgia del pasado no debe hacer mella en una extraordinaria poeta como tú.
Limpia las vidrieras a conciencia, déjalas realmente hermosas, y mira al futuro.
Un beso
dos corazones partidos...
ResponderEliminarbss
Hawwah
ResponderEliminarTodavía no están partidos,
sólo ajados.
Besos.