Maresía, 1997 - MARTA MARIÑO
A veces vuelve el pasado sin aviso
y se nos clava en el fondo
de las pupilas sin imágenes.
Sólo entre sombras lejanas y difusas
retorna un eco de antiguas voces
y vuela el sonido del silencio
en una pleamar de palabras
que nacen muertas en los labios.
Triste pero hermoso poema.
ResponderEliminarUn abrazo
A veces el pasado esta repleto de silencios que escapan a gritos, querido Noray.
ResponderEliminarUn buen poema, de los que dejan huella.
Un abrazo.
desde mi orilla llega esa marea de tus versos
ResponderEliminarque viene y va en mi arena existencial
precioso!
abrazo grande
Maravilloso final, los tres últimos versos me parecen geniales.
ResponderEliminarUn beso,
Laura