Henrietta Moraes on a red ground, 1964 - FRANCIS BACON
No sé si mi inmolación
será acaso un simple sacrificio
que pueda ser contemplado
sin ningún tipo de pudor
ante las puertas del abismo.
No sé si esta entrega
desnuda y sincera
podrá ser derramada algún día
como ofrenda perpetua
sobre el altar de tu carne.
Seguro que la ofrenda será valorada y apreciada.
ResponderEliminar¡Hermosa entrega Noray!
Besos
Me he emocionado mientras te leía.
ResponderEliminar...
Ninguna entrega es en vano..
ninguna lucha se pierde
salvo la que se abandona.
Te abrazo Ad Infinitum.
qué ofrenda más preciosa!!
ResponderEliminarasí todo sacrificio tiene oído y respuesta generosa
besos
El título ya es para quedarse.
ResponderEliminarAbrazotes.
Es estremecedor. Enhorabuena por ese sentimiento.
ResponderEliminarUn beso
Estoy seguro que no tienes que pedir permiso...
ResponderEliminarPues yo eso de inmolarse y ofrendas perpetuas, como que no va conmigo...
ResponderEliminarla vida es muy breve y tiene mucho que ofertar, en otras fronteras, en otras bocas, en otras vidas, en otros lugares.
Un saludo
Ofrenda de amor hermosamente escrita.
ResponderEliminarSaludos,
Con altares así... ni te cuento.
ResponderEliminarUn Abrazo.
Sobre el ara
ResponderEliminarcuerpo y alma
se desnuda.
Los versos,son fiel
reflejo de la imagen.
Un fuerte abrazo
Y aquí siempre presente ante tus maravillosos poemas maestro.-- Excelentes como siempre..
ResponderEliminarUn abrazo
Saludos fraternos..
PD: por problemas con el ordenador he estado ausente.. pido disculpas..
Nada como desnudarse en una entrega. Siempre debe de ser así, amigo.
ResponderEliminarBesito para ti.
STKEI.
Ups... STEKI.
ResponderEliminarCreo que es sencillo de lograr que sea ofrenda perpetua : acordar un matrimonio, un hogar, un camino juntos por andar. Creo que a ambos protagonistas llenarían de felicidad.
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