“Soy el que es nadie, el que no fue una espada
en la guerra. Soy eco, olvido, nada.”


JORGE LUIS BORGES

domingo, 24 de enero de 2010

Haiku en calma

Blue Ocean IV, 2006 - CLIFFORD SMITH

Sólo el océano
devolverá la calma
a mi interior.

13 comentarios:

  1. Es como una droga, que hipnotiza...
    Su rumor, su color, sus lágrimas saladas...

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  2. A lo mejor la agitación de fuera calla la de dentro. Yo a veces intento que sea así. Un beso

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  3. Así será, la unión de la inmensidad de lo externo con la inmensidad de lo interno.
    Un abrazo.

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  5. Me encanta la lectura que ha hecho Milagros. Estaba preguntándome el porqué de la calma... pero está claro que nosotros solo vemos la superficie. Dentro... la calma.

    Simple, limpio, natural, haiku...

    Besos.
    Laura

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  6. En la inmensidad
    del azul
    descansa sereno
    el espíritu.

    Un gran abrazo.

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  7. El oceano cambia nuestro paladar sobre la vida, nos hace soñar, hace que nuestra templanza se calme en cualquier instante.

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  8. Sentadito en una roca contempla su canción, escucha su movimiento. Ahora siente sus aguas.

    Yo me largo al océano de Chamberí.

    Abrazos marineros.

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  9. Contemplar sus movimientos repetidos que hipnotizan...devuelve, efectivamente, la calma al corazón.

    Muy bello.

    Un abrazo.

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  10. Mejor forma de expresarlo...!!!!??? imposible.

    cariños.
    muakkkkkkkkkkkkkkkkkk

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  11. Es que el mar tiene su manera de hablarnos, de transmitirnos con sus sonidos toda esa paz que la mayoria de las veces buscamos...
    Muy bello Noray, extrañaba leer tus escritos...
    Regresando recien de mis cortas vacaciones, tambien mi alma se calma al leerte!!!
    Mil besos llenotes de luz!!!

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  12. El océano es paz y belleza, pero también es muerte,oscuridad, noche, tormentas y sunamis...

    Nadie mejor que uno mismo, para encontrar la paz interior.Siendo sinceros y aceptando errores y perdonándonos a nosotros mismos, por no ser o hacer lo que deberíamos, o lo que de deseamos.

    Besos, de mar.

    U

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Inexorablemente, dos somos infinitamente más que uno.