Body and Soul, 1957 - JEAN FAUTRIEREn este solsticio de verano,
entre raíces de fuego,
alumbremos nuestro cuerpo
y nuestra desolada alma.
Sin cicatrices, sin palabras,
porque las palabras,
a veces, son cicatrices
de nuestros silencios.
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¡Qué bonito!
ResponderEliminarEn realidad las cicatrices pueden ser causadas por las palabras, también por los hechos, e, incluso, por el mismo silencio ignorando a alguien.
Encantada de estar aquí, lo que pasa que tienes una inspiración muy amplia y no me dá tiempo a seguirte porque más vas volando que yo jajaaj y no te logro alcanzar.
Un beso.
tremendamente cierto
ResponderEliminarfino,agudo,funesto
comprometido,alentador
triste alegre,revindicador...
♥♥♥♥♥♥♥besos♥♥♥♥♥♥
afilada y certera pluma que desentraña verdades
ResponderEliminarla piel se despierta sin que ninguna palabra la llame...
un abrazo
Te abrazo con mi mejor energia.
ResponderEliminarMentesSueltas
Es muy bonito, la verdad. Un beso.
ResponderEliminarHermosos blogs y cada uno de los que fui visitando, dejan sabor a volver.
ResponderEliminarGracais por tu visita a Versos Complicados.
Un abrazo grande,
Migdalia
Precisas preciosas palabras, como siempre. Un abrazo mi admirado y prolífico poeta.
ResponderEliminarMaría
ResponderEliminarCierto, todo depende del uso que hagamos de las palabras y los silencios.
A veces,
una palabra hiere,
a veces,
un silencio mata.
Un beso
Mía
ResponderEliminarLas heridas que dejan
las palabras y los silencios,
a veces, no suturan nunca.
Un beso
Camille
ResponderEliminarDespertemos nuestra piel,
nuestra alma,
nuestro cuerpo,
sin palabras,
sin silencios.
Un abrazo
Mentesueltas
ResponderEliminarGracias por abrazarme con tu energía, siempre es necesario recargar las baterías.
Un abrazo.
Waiting for Godot
ResponderEliminarComo en la obra de Samuel Beckett, todos somos como Vladimir y Estragon que esperan que mañana aparezca Godot.
Gracias por amarrar en mi noray.
Un beso
Versos complicados
ResponderEliminarGracias por llegar a este puerto y amarrar en mi noray. Espero volver a verte.
Un abrazo.
Jose
ResponderEliminarPrecisa es tu lectura y tu comentario y eso me alegra.
Un abrazo
Si,creo que las palabras pueden llegar a ser cicatrices de nuestros silencios cuando el dolor es tan fuerte que hablamos através de el...
ResponderEliminarUn abrazo
palabras... cicatrices, palabras heridas que no sanan...
ResponderEliminarhermoso poeta tus palabras en este caso son luces en mi corazón.
besos
Estoy de acuerdo. Las palabras pueden dejar las peores cicatrices.
ResponderEliminarPero las tuyas no, amigo.
Las tuyas sanan y hacen sentir mejor.
Un abrazo muy grande.
cuando somos capaces de poner en palabras parte de lo que sentimos es que ya estamos cicatrizando nuestra herida.
ResponderEliminarBello, muy bello
un beso
Claudia
ResponderEliminarLas palabras,
a veces,
cortan como una daga.
Un beso.
Enredada
ResponderEliminarEs un placer que mis palabras y mis silencios sean luces en tu corazón.
Un beso.
Alatriste
ResponderEliminarSi mis palabras y mis silencios son tu analgésico, entonces es que tu dolencia no es grave.
Un abrazo
Sasian
ResponderEliminarEstoy completamente de acuerdo contigo, pero casi siempre queda un punto sin suturar.
un beso