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La noche (Poema del Atlántico), 1917/18 – NÉSTOR MARTÍN FERNÁNDEZ DE LA TORRE
La noche es fría y negra,
demasiado negra y fría
para ser yunque del silencio
donde dar forja a cada sílaba.
La noche es demasiado negra,
es un pozo que engulle las sombras
entre las mismas sombras mortecinas
en las que se alumbran el lenguaje.
La noche continúa siendo tan fría
que se hiela el océano de la razón
mientras aparece la soledad interior
y el vértigo feroz de mí mismo.
ella nos engulle y nos regurgita sin miramientos... impúdica y rebelde
ResponderEliminarbesos de luz
ten un precioso fin de semana
Y la noche, también es escenario de musas, romances y aspiraciones.
ResponderEliminarUn saludo,
La noche es fría y negra
ResponderEliminarcuando no estás tú.
Pues te invito a unas birritas en mi "ultimo reducto de sucios cristales y músika de blues", donde se espesa el ambiente, pudiéndose cortar con machete... que con cuchillo, tl vez no.
ResponderEliminarUn Abrazo.
Pero tambien la noche pinta rayos de luna, y en el pesado silencio a veces se escuha tañer de campanas a lo lejos, despertando los sueños...
ResponderEliminarUn saludo
La noche se hace eterna a nuestro paso.
ResponderEliminarEn esos momentos tan tristes e irremediablemente muy difíciles de asumir, suelo abrir la ventana de mi despacho y mirar la luz del lucero que siempre viene en mi ayuda. ¿Es un amigo, un compañero, o es Venus que fué creada para consolar a los poetas melancólicos en las frías y duras noches de invierno? Un abrazo, poeta.
ResponderEliminarLa noche abre sus fauces y no dejaremos que nos engulla porque miramos de frente al Sol y sabemos que no estamos solos.
ResponderEliminarBesos Noray
Ese frío interior que tanto cuesta de vencer...
ResponderEliminarSólo, de vez en cuando, te abriga un poema cálido en la noche oscura.
Te abrazo fuerte en la distancia, Noray.
Cuando se esboza la noche negra y fría,
ResponderEliminarla llamo y llega,
acurrucándose en mi vera.
Precioso poema amigo poeta.
No hay noche màs frìa y oscura que la de quien no quiere ver el dìa, tengamos siempre abierta nuestra ventana y que el sol entre por ella a rausales.
ResponderEliminarNo es màs que un consejo de quien muchas veces la cierra a cal y canto.
Un abrazo.
La noche se vuelve fría cuando la soledad es presencia.
ResponderEliminarAbrazos,
Una noche así de fria, donde se hiela el océano de la razón, quizá sea así por estar muy solitaria, todas las noches necesitan compañía, ya sea la noche o quien transita la noche. Luego...todo se entibia, hasta ese mar y ese corazón.
ResponderEliminarBello poema, ofrece muchas interpretaciones, deja abierta las posibilidades. Me encantó.
Muchos abrazos,
Anouna