
Llueve,
la calle llora,
sobre las aceras
se derriban círculos
de voces humanas.
Llueve,
la calle llora,
el aire gravita
sobre una sábana
de desesperanza.
Llueve,
la calle llora,
en el asfalto
se hunde un niño
que no ríe,
no canta,
no llora,
no dice nada.
Llueve,
la calle llora,
el ser humano
muere vacío
en medio de la nada.