Muchacha con turbante o la joven de la perla, 1665 - JAN VERMEER
Si el aire tuviese piel,
si tuviera piel el agua,
podría palpar tu sombra
y me evaporaría en tu alma.
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Si el sueño se hiciera cristal
como esta piel de aire
bastaría con vestirnos
esta piel de agua.
Es tan grande la distancia
entre tu piel y mi agua
que no encuentro modo alguno
de existir en tu mirada.
