“Soy el que es nadie, el que no fue una espada
en la guerra. Soy eco, olvido, nada.”


JORGE LUIS BORGES

martes, 3 de marzo de 2009

Conforme pasa el tiempo


Rick's Cafe Americain (Serie Casablanca), 2008 - NOEMI SILVERA


La primavera nacía en mis labios
como un amuleto del olvido
en la memoria de las largas noches
de aquel lejano verano en Marruecos,
en donde pasaba las interminables horas
sentado en la avenida de Tánger,
frente al mar, recogiendo sueños de estrellas y sal
para guardarlos en cajas con incrustaciones de fósiles.

Ahora pienso en aquellas noches
de lunas inmensas de color mandarina
sobre la playa desierta, y vuela mi memoria
hasta Malabata, para saborear el té verde
en los jardines del faro con una tranquilidad infinita,
o para perderme por las callejuelas
tortuosas y empinadas de la Medina de Fez,
repleta de colorido e impregnada de olores
que difícilmente podrán olvidarse.
Pienso en la Medina de Marrakech
y en la algarabía de Jamaa el Fna,
repleta de gente venida del desierto,
en la calma de la Menara y la Koutubia
y parece que todavía estoy allí,
contemplando el tintado multicolor
de las pieles curtidas al sol.

Aquel verano fue diferente,
buscaba a Rick y a Ilsa,
al Capitán Renault, a Ugarte y a Laszlo
en las calles de Casablanca,
sin alcanzar a comprender
que ni la Bergman ni Bogart iban a aparecer
por el salón del inexistente Rick’s Café Americain,
aunque la Guerra hubiera terminado hacía muchos años.
Tócala otra vez Sam.
Tócala una vez en recuerdo de los viejos tiempos…
Los alemanes iban de gris y tú ibas vestida de azul…
Siempre nos quedará París…
Sonaban en mi cabeza, sin parar todo el tiempo.
Debes recordar esto:
un beso es sólo un beso,
un suspiro es sólo un suspiro.
Las cosas fundamentales suceden
conforme pasa el tiempo.
Play it, Sam. Play As time goes by.
Creo que este es el principio de una gran amistad.

Deja que se oiga para siempre,
conforme pasa el tiempo.