Champs d'iris jaunes â Giverny, 1887 - CLAUDE MONET
Escucha el eco del viento
en el silencio de este atardecer.
Escucha como se retuercen
los cristales, reptando como serpientes
hasta hacer desangrar la piel.
Escucha el coro de voces
que nace entre los árboles.
Escucha el eco del viento
como se mece entre los lirios
que florecen en cada latido
de mi corazón.
de mi corazón.
Se escuchan...
ResponderEliminaresos acompasados versos
con ritmicos latidos...
y se sienten.
Abrazos...
Sin duda que se oye.... Un canto hermoso.
ResponderEliminarCariños!
El eco del viento,maravilloso,hermoso,te felicito.Cada tanto vengo y paso por tu sitio para verte,leerte y encontrarte entre tus notas.Mas que decirte que tu lugar es placentero de visitar y produce en mi el encanto que se necesita para volver siempre.Te invito a Cuentos y Orquideas y leer algo nuevo,un abrazo para ti,mucha luz y hasta pronto...
ResponderEliminarPaso a dejarles mi saludos fraternos de siempre..
ResponderEliminarDisculparme por mi ausencia..
Por razones de viaje no he podido estar en cada unos de sus blog.
Continuo con mi viaje y pronto espero poder con el ritmo normal para compartir sus escritos..
Un abrazo
Saludos fraternos..
Es bonito este poema y quién lo diría que te llega la inspiración con sólo evr el impresionismo de Monet. Tienes mucho oficio sin duda. Un gran abrazo
ResponderEliminarNoray, tus letras son emotivas e intensas!!
ResponderEliminarVine a escuchar el eco del viento y escuche ese corazón latir.
Que sensibles estamos!!
Un abrazo poeta de la luz
Hermosa entrada amigo, y los campos llenos de iris son perfectos.
ResponderEliminarEl viento con su vaivén
mece los árboles ...y el silencio les enternece...
Un saludo agarimoso.
Hola!
ResponderEliminarHermoso y sentido poema, sólo hay, que saber escuchar.
saludos
Maite
Hermoso el poema que nos acercas en este día, es un placer acercarse a tu espacio.
ResponderEliminarGracias por compartir.
Cálido abrazo.
Es como escuchar las voces del alma. Abrazos.
ResponderEliminarVerso y latido,
ResponderEliminarviento y lírio,
embellecido todo
ello por Monet.
No se puede pedir más.
Un abrazo
Escucho.
ResponderEliminarY escucho el sonido del viento sobre ese campo de lirios amarillos.
¡Gracias!
Laura
En las caricias del viento se eleva, inocente, la espiritualidad del lirio.
ResponderEliminarGracias por estos versos.
Un abrazo
A veces es su eco, otras sus gemidos y muchas sus caricias, parece como si quisiera emular al amor.
ResponderEliminarUn abrazo.
Estoy escuchando tus latidos entre las letras, y veo moverse las flores de Monet.
ResponderEliminarTodo un privilegio.
Ese coro de voces susurran tus versos.
ResponderEliminarUn abrazo, Noray.
Escucho... y de fondo ese piano de Rubinstein que siempre me atrapa y aplaca...
ResponderEliminarabrazos.
Ecos,...coros,...reflejos,...de Monet,...
ResponderEliminar...en tu voz de letras.
Muy bonito.
B.T.C.N.
Besos.
Y tú lo haces sentir de veras...
ResponderEliminarMe imagino tumbada en la hierba, sintiendo la brisa alrededor...casi se escucha el trino de algún pájaro...
Qué poder tienes, qué don que nos transporta...
Mi admiración siempre.
AME
Batega fort al compàs del vent
ResponderEliminarel finestral obert,
com ho fa el cor incert
deixant a l’amor fent
càntics i ferides
de l’esclat dels vidres
en trencar-se com mentides
que entren en les nostres vides.
I vols que escolti els cors aliens
de veus i brancatges,
mentre dansen les flors com lliris
reflectits en els miralls d’uns iris
que ja no conec,
fonent-se la memòria
en cada batec.