The water nymph, 1923 - JOHN COLLIER
Me he acostumbrado tanto a ti
que te siento cada anochecer en mi piel
y planeas en cada amanecer sobre mi pensamiento.
Me he acostumbrado tanto a ti
que ya te respiro en los ríos de mi sangre
y existes en cada uno de mis movimientos.
Me he acostumbrado tanto a ti
que te veo en los sueños emerger
como la dulce ninfa de un poema incierto.
Me he acostumbrado tanto a ti
que mis heridas llegan a cicatrizarse
con un solo suspiro de tu aliento.
Me he acostumbrado tanto a ti
que sólo el temor de poder perderte
me hace vivir ya como si estuviera muerto.
Acostumbrarse es algo que a veces cuesta mucho, demasiado y cuando lo hacemos es que estamos seguros pero sobre todo, a gusto...
ResponderEliminarNo se si me gusta la palabra acostumbrarme, pero en tus veros suena tan bien que todo parece maravilloso!!!
ResponderEliminarY quizas sea como dices en el final, el temor de perder a alguien preocupa hasta sentir que uno muere!!!
Besos cielo, llenos de luz para ti!!!
Nos apegamos demasiado a las personas, a las cosas, a todo... es luego ese sentimiento tan doloroso de dolor y agonía, cuando se alejan de nuestro lado por el motivo que sea, por eso debemos intentar ser individuales a pesar de nuestros sentimientos de amor hacia los demás.
ResponderEliminarNoray, me gustó mucho este poema, porque precisamente, yo soy muy apegada a todo, me duelen mucho las despedidas.
Un beso, amigo.
NOray:
ResponderEliminarEsa última estrofa... A tantos nos pasa...
Abrazos.
Guaaauuu, es para morirse y que la entierren a una con esta mùsica del beso.
ResponderEliminarNoray, no se te pue aguantar!!!
Queee fuerza!!
Es la FUERZA claro, no puede ser otra.
Ten compasiòn, mira que las almitas estan muy sufridas!! Y se desconsuelan!!
ResponderEliminar¡Quién pudiera escribir así los versos del corazón! ¡Quién pudiera vivir los momentos sin pensar en los venideros!
ResponderEliminar¡Quién pudiera sentir el aliento de su suspiros una vez más para curar las heridas que duelen tanto!
Un placer como siempre desde que te leo.
"Me he acostumbrado tanto a ti
ResponderEliminarque mis heridas llegan a cicatrizarse"
Siempre existirá la llama que todo lo quema, que todo lo porne en carne viva... aunque te acostumbres
Saludos!
El cierre de tus versos me ahogaron en suspiros....
ResponderEliminarbesos muchos.
muakkkkkkkkkkkkkkkkkkkk
Me he acostumbrado tanto a ti
ResponderEliminar......
Este poema lo he sentido
especialmente,
costumbrada a la presencia
de los míos siempre
tan cerca.
Un abrazo
La costumbre en versos, la vida..
ResponderEliminarUn abrazo Poeta
Saludos fraternos
Acostumbrarse al amor, lo hace eterno, encallado para siempre en los arrecifes de la vida. No mueras por perderlo más que en la lírica del verso.
ResponderEliminarHay poemas que se leen, el tuyo se siente.
Un abrazo.
ella no quiere que la pierdas:) seguro que te buscaría debajo de las piedras:) un beso!
ResponderEliminar¡Bellísima entrada!. Te luces como siempre.
ResponderEliminarY nos acostumbramos tanto, pero tanto, que nos vamos desgarrando por dentro con cada despedida...
ResponderEliminarHermoso leerte poeta
Un abrazo
Hay costumbres a las que cuesta mucho desacostumbrarse.
ResponderEliminarSaludos.
Las palabras se vuelven sencillas y expresan lo profundo cuando son ciertas. Así es tu poesía, amigo.
ResponderEliminarAbrazos del REL
Sentimiento intenso y profundo en tu poema.
ResponderEliminarUn abrazo.
Que tengas un buen veranito.
ResponderEliminarSiempre excepcional en tus poemas.
Un saludo.
El amor es así de posesivo, pero muchas veces sin desearlo nos enamoramos para siempre. Un abrazo.
ResponderEliminarLa anáfora con la que comienza cada estrofa ("me he acostumbrado tanto a ti") tal vez le confiera un cierto tono cursi al poema.
ResponderEliminar