“Soy el que es nadie, el que no fue una espada
en la guerra. Soy eco, olvido, nada.”


JORGE LUIS BORGES

martes, 29 de julio de 2008

Carta para mi desahogo

Quiénes somos, de dónde venimos y adónde vamos, 1991 - RICARDO CARPANI
-
“Vosotros, que surgiréis del marasmo
en el que nosotros nos hemos hundido,
cuando habléis de nuestras debilidades,
pensad también en los tiempos sombríos
de los que os habéis escapado”.
-
BERTOLT BRECHT
-
-Quisiera que este poema
fuera como una carta,
como una de esas tantas
que nunca se envían
y que, precisamente, por eso
son las más íntimas.

Con esto sólo quiero
encontrar mi desahogo,
no sé por qué siempre
he tenido que buscar
mucho más allá
de lo que me daban,
nunca he quedado satisfecho
con lo que se me presentaba,
quizás haya querido saber
hasta donde puedo llegar,
hasta donde dejar volar
mis ideas y mis sentimientos.

Pero, en realidad, creo
que con el paso del tiempo
esta situación me ha llevado
a un caos extraordinario y singular,
al caos del que cree que nada sabe,
al caos del que no es nada en sí mismo
porque sabe que algún día no será nada.

Seguramente, todo ello esté motivado
por la gran incertidumbre
que, desde siempre,
envuelve al ser humano
y que no es otra que el mañana,
ese mañana en el que me encontraré,
cara a cara, con mi negación,
con mi propia muerte,
con mi propia inexistencia.

Y cuando llegue esa destrucción,
todo este tiempo ya pasado
habrá servido únicamente
para ser una tuerca más
en la vida humana.

Dónde quedará después el hombre,
sus vivencias y recuerdos,
sus pensamientos y nostalgias,
sus ilusiones y desesperanzas,
sus éxitos y fracasos,
su amor y desamor,
dónde quedará su nada.

Y aquí es donde nace mi angustia,
una angustia que me asfixia,
que me desvanece a cada instante,
y que incansablemente me atenaza.

Esta angustia, vital si se quiere,
me precipita en el caos,
aunque viva en un cosmos imaginado,
y en la noche me aisla del mundo,
me sumerge en la negación del ser
y en la soledad interior,
y me empuja a la náusea,

Cuando estoy solo conmigo mismo,
y observo en la distancia las frustraciones,
la indiferencia y la deshumanización
que ha creado el ser humano,
mi corazón y mi alma
revientan de impotencia y rabia
y me cuestiono en silencio
qué soy en realidad,
qué busco, qué hago,
hacia dónde vamos.

En este mundo que se resquebraja
bajo nuestros propios pies
y que desmorona nuestra existencia
nos encontramos solos y vacíos,
aunque creamos ser dioses
y tengamos la vanidad de negarlo.

12 comentarios:

  1. este mundo no se resquebraja, en este mundo estás eres tú mismo en cada instante, el milagro de la vida, de la lucha, de la felicidad cuando aparece por momentos, del atardecer sobre ese mar en el que habitas...
    de vez en cuando cuando me invaden algunos sentimientos hago un inventario de cosas buenas que nos suceden... a veces me resulta.
    un beso.

    ResponderEliminar
  2. Tu tormento, es compartido por mis silencios. Cuántas preguntas sin respuesta aparente, y que sin embargo, ya han sido respondidas, miles de veces, por aquellos que han sido capaces de vivir felices, creándose una burbuja que los aisle del resto del mundo, que mal llamamos "civilizado". Tal vez debamos imitarles, amigo.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  3. y lo peor es que el caos no encuentra su consuelo, salvo quizá el momentáneo que surge de la belleza narcótica e intuida a veces, en mitad de las noches vacías de los dioses...

    sobrecogedora carta, amigo mío

    un abrazo...

    ResponderEliminar
  4. Abrazo solidario...y gracias por compartir tu angustia.

    "Cuando la soledad te despoja
    de mucho mas que la misma vida
    cualquier intento se torna en congoja
    y en gritos del alma afligida y herida".

    Un beso
    Yeli

    ResponderEliminar
  5. quizás hayas querido saber hasta donde puedes volar...

    esa angustia
    ese vacío
    esa soledad
    ese silencio
    y esa incertidumbre
    es compartida querido amigo...

    me gustó mucho que compartieras esta carta-poema
    este poema-carta

    Un abrazo grande

    ResponderEliminar
  6. Expones tu intimidad, y nos invoca a la interpretación, nos invitas a rebajar tu angustia, desahogarte, desnudarte. Llevas días haciéndolo, con esos poemas y escritos en los que te colocas en la posición de la nada, y que me sobrecogían de tal manera que era imposible para mi hacerte comentario alguno.
    Dices que siempre has tenido que buscar más allá de lo que te daban...necesitabas de la invención, tener todo en su sitio, ir mas lejos. Tal vez, nadie podía cubrir todas tus expectativas, tal vez, nadie podía o sabía acertar tu deseo real.
    Es lo que te lleva al caos, entendido como confusión, confusión entendida como perturbación, desasosiego.
    Nunca serás nada amigo Noray, porque ya eres y quedarás, a tu propio pesar amigo mío. Desde que compartes, al menos con nosotros ya has provocado el acto que impide tu negación, tu inexistencia. Y yo lo celebro con alegría
    Todos tendremos que enfrentarnos a nuestra muerte, y celebraremos haber podido ser aunque sólo sea la grasa que mantiene en buen estado una pequeña tuerca del mundo del que no lo olvides formas parte.
    Dónde quedará el hombre con sus vivencias, recuerdos, ilusiones, éxitos te preguntas... quedará en nosotros, en nuestra historia, en nuestro pensamiento, en tus escritos, en tus amores, en la memoria del mundo...allí quedará, te lo aseguro. Y si no es así, que más dará?. Lo habrás disfrutado mientras hayas estado...te estamos disfrutado.
    Entiendo que esta angustia te precipite a ese caos, que te turbe el ánimo, pero recuerda que ese caos es el que permite la ordenación de ese cosmos imaginario en el que te mueves...da igual sea imaginario o no. Es tu cosmos y tienes derecho a construirlo.

    Me pregunto, qué es lo que de verdad te turba, te provoca nausea, qué es. Cómo llegar a tu angustia y poder decirte que lo importante es a donde vas tú. Que mientras existas habrá alguien que pueda enseñar las diferencias.
    Creo que la angustia te la provoca no saber tu mismo que buscas. O no querer saberlo. Sin máscara
    Tengamos la vanidad de creernos dioses, dejar caer las cosas caducas de este mundo y desde el caos inventar, crear, soñar, desmoronarnos y volvernos a rehacer.
    Celebro que puedas desahogarte escribiendo tan bien.
    Y perdona mi atrevimiento, pero uno de los sentimientos que no me permito dejar pasar es la angustia...
    Un abrazo, caótico, sin máscara, arrogante, avaricioso, imaginario, real, pleno...

    ResponderEliminar
  7. Me sentí muy identificada con tu poema de hoy; creo que tu desahogo fue también un poco el mío.
    Un beso muy grande.

    ResponderEliminar
  8. Hoy no es un buen día para mandarte flores, pero si animos que te arrebaten del caos y la incertidumbre... el hombre siempre queda en la persistencia de la memoria, al menos aquellos que dejarón huella, aunque solo fuera en el recuerdo de unos pocos, ;).
    Me encanta entrar a este blog, lo digo en serio, sin animo de nada mas...y sin animo de lucro ja,ja,ja,ja,ja...no se por qué cuando me pongo trascendental, despues exhalo una risa.
    ;) cuidate y dejas las elucubraciones para mi, es mi sino de vida.

    ResponderEliminar
  9. vaya reflexión tan desgarradoramente real y aunque nuestro mundo nosotros mismos lo estemos acabando es bueno tirar de la esperanza para seguir, si estamos aquí para intentar ser felices que es lo ideal y que obviamente choca con lo real, pués a luchar por ello, somos en presente aunque no podamos borrar un pasado y el mañana... el mañana ya se andará... todo llegará... hasta la muerte vendrá.... ojalá terde mucho y que al venir para acá se enrede en su túnica maloliente, tropiece, caiga y se entierre la hoz que lleva y muera.

    Saludos conversos. .

    ResponderEliminar
  10. A todas y a todos

    Gracias, me han dejado sin palabras. Ya saben que, a veces, los silencios encierran todo un diccionario.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  11. Sublime!!!

    Cada día creces dentro de tu alma

    y de tu ser y nos das calma

    bienestar y paz en detrimento

    de tu sensibilidad creadora!

    He gozado dentro de tu martirio

    por la belleza enorme de tus sentidos,

    gracias,gracias!

    ♥♥♥besos♥♥♥

    ResponderEliminar

Inexorablemente, dos somos infinitamente más que uno.