Jarrón con Gladiolos, 1886 - VINCENT VAN GOGH
A mi madre.
En su tercer año de silencio.
sólo muere
quien muere en el olvido
Tu silencio es un océano
colmado de miradas,
me hace temblar la voz
cuando llega diciembre.
Tu imagen va y viene,
como una sombra
escarchada en el viento,
se torna en soledad
que llena de ausencia
los abrazos.
Tu muerte es una herida
que no cicatriza en la piel
y arde cada jornada
en mi memoria.
me hace temblar la voz
cuando llega diciembre.
Tu imagen va y viene,
como una sombra
escarchada en el viento,
se torna en soledad
que llena de ausencia
los abrazos.
Tu muerte es una herida
que no cicatriza en la piel
y arde cada jornada
en mi memoria.
Siempre estoy,
ResponderEliminaren cada 19 de cada mes,
de cada año
en que su herida se abre
de nuevo y deja surcos de dolor
en tu piel.
Te abrazo,
te aprieto fuerte la mano,
siempre estará contigo,
Ella nunca se irá de ti.
Cuando el abrazo
ResponderEliminarpervive en el corazón
la ausencia
no muere en el silencio.
Bellas flores
para una madre.
Un gran abrazo.
Me uno a ti en el dolor que me produce diciembre, y esta vez, te abrazo aún más fuerte.
ResponderEliminarUN abrazo fuerte amigo, me uno a tu dolor.
ResponderEliminarEse amor inolvidable que nos lleva de la mano aunque nos creamos solos o abandonados...Un abrazo.
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