Nosotros somos pequeñas ciudades también. Y cómo escuece la soledad y cómo grita el silencio. A veces el agua limpia a un precio mucho más alto que el de su mismo valor. Un abrazo
"... y silencio"... Y pasa solitaria y pulsando, "la medusa", triste y gris bajo el aguacero de tantas soledades que lloran... Hoy me resultaste mágico: transmutación completa y totalmente lograda; evolución del concreto hacia una concepción como ente orgánico que de espacios, silencios y melancolía, encharca sus sueños. Magistral. Abrazo y cariño para ti, Noray.
La ciudad es el mejor invento para acercar a las personas a la insensibilidad de las maquinas y alejarlas cada vez más de su esencia humana. La cultura de la ciudad vertical es quizás uno de los rasgos más visuales del capitalismo salvaje, donde todos somos una simple cifra a la que se la mira como un beneficio o pérdida....La ciudad entendida así es una......
Tu otro blog tan comprometido me ha gustado mucho amigo.
Pronfudo poema, pleno de sentido a pesar de su brevedad, y es que escuece tanto la soledad y el silencio en medio de la multitud, cuando ya sólo se escucha ese estrepitoso y repetitivo clamor carente de sentido, de significado, de sentimiento... que nos ensordece, nos enmudece y nos aisla del resto de la humanidad.
Sin duda tu palabra suena tan potente que se escucha y se lee, a pesar de los gritos del silencio.
me gustaba más cuando ponías colores en las letras de tus versos. me parecian a veces, versos de océano, o versos de fresa si eran rojos como pétalos.
otras me parecían palabras llenas de luz y de sol, y, a veces, cuando eran colores oscuros me daba la sensacion de estar a solas, escribiendo tus versos por las paredes de este cuarto que te nombra, devolviendo en cada eco un verso tuyo, leyéndote y aprendiéndote en soledad.
Una bonita metáfora.
ResponderEliminarImagen y poemas totalmente compenetrados que te llaman a la contemplación y a saborear la meditación de los versos.
Un Abrazo.
habitar el silencio a veces es descubrirse a uno mismo...abrazos
ResponderEliminarNosotros somos pequeñas ciudades también.
ResponderEliminarY cómo escuece la soledad y cómo grita el silencio.
A veces el agua limpia a un precio mucho más alto que el de su mismo valor.
Un abrazo
Muy bello...
ResponderEliminarLas soledades
ResponderEliminarno siempre son las metas
de los silencios.
Profundo poema, el que hoy nos regalas.
Un abrazo.
aloe,
Tu poema me parece tremendo (que hace temblar). Me deja sin lenguaje.
ResponderEliminarUn abrazo
Por aquí nieva
ResponderEliminarpor allí llueve.
La ciudad es una medusa
con forma de paraguas.
Que bella imagen.
Un abrazo
que bella metáfora Noray
ResponderEliminarescuece y a veces petrifica toda sencibilidad
besos
"... y silencio"... Y pasa solitaria y pulsando, "la medusa", triste y gris bajo el aguacero de tantas soledades que lloran... Hoy me resultaste mágico: transmutación completa y totalmente lograda; evolución del concreto hacia una concepción como ente orgánico que de espacios, silencios y melancolía, encharca sus sueños. Magistral. Abrazo y cariño para ti, Noray.
ResponderEliminarPreciosa metáfora.
ResponderEliminarEl silencio se puede
habitar sin palabras.
Un gran abrazo
Que ingeniosa tu mirada y que bellos tus versos.
ResponderEliminarUn abrazo.
La ciudad es el mejor invento para acercar a las personas a la insensibilidad de las maquinas y alejarlas cada vez más de su esencia humana. La cultura de la ciudad vertical es quizás uno de los rasgos más visuales del capitalismo salvaje, donde todos somos una simple cifra a la que se la mira como un beneficio o pérdida....La ciudad entendida así es una......
ResponderEliminarTu otro blog tan comprometido me ha gustado mucho amigo.
Abrazos peninsulares
Demasiados aguaceros en soledad.
ResponderEliminarSaludos.
Hermosa imagen, es la primera vez que paso por aqui, pero me voy muy agradecia.
ResponderEliminarLindas letras.
Elva
Y si Noray a veces la ciudad es una medusa que se activa con nuestros vacíos y torna de piedra el alrededor.
ResponderEliminarMaravilloso poema.
Va beso.
M.
La imagen de tu poema me enmudece.
ResponderEliminarQuedé ahí, bajo el aguacero, atada al silencio.
Un abrazo,
Clara
Fantástico. Cada vez escribes mejor. Eres grande. Nos emocionas. Abrazos
ResponderEliminarPronfudo poema, pleno de sentido a pesar de su brevedad, y es que escuece tanto la soledad y el silencio en medio de la multitud, cuando ya sólo se escucha ese estrepitoso y repetitivo clamor carente de sentido, de significado, de sentimiento... que nos ensordece, nos enmudece y nos aisla del resto de la humanidad.
ResponderEliminarSin duda tu palabra suena tan potente que se escucha y se lee, a pesar de los gritos del silencio.
Besos
Wuao! me ha encantado esta forma tan precisa de definir el mayor de los naufragios!
ResponderEliminarBesos
Marian
me gustaba más cuando ponías colores en las letras de tus versos.
ResponderEliminarme parecian a veces, versos de océano, o versos de fresa si eran rojos como pétalos.
otras me parecían palabras llenas de luz y de sol, y, a veces, cuando eran colores oscuros me daba la sensacion de estar a solas, escribiendo tus versos por las paredes de este cuarto que te nombra, devolviendo en cada eco un verso tuyo, leyéndote y aprendiéndote en soledad.
Genial. Breve y completo. ¿Qué es? Es esto. Y ya... ya no hay más que decir sobre lo dicho con poesía. Mayúscula poesía.
ResponderEliminarUn beso.
Laura