El jinete de la muerte, 1935 – SALVADOR DALÍ
Las palomas blancas se volvieron ortigas
y entre los trinos de la inquina
enmudecieron los ruiseñores.
Sobre la tierra sedienta quebraron
sus finas raíces los alargados girasoles
a la luz de un amanecer,
que muda los jardines de mariposas
en deshabitados cuerpos.
Tantos se han ido quedado en el camino
a lo largo del tiempo,
deshojando sus propios ideales
en la soledad de la noche,
asesinados en improvisados paredones
o en cualquier infame cuneta
y pudriendo sus vidas en cárceles
entre una sementera de versos
que nunca llegaron a florecer.
Nada ha sido tan funesto
como la infinita maldad del ser humano
contra sus propios semejantes
cuando desata la represión y la guerra,
excretando el resentimiento y la injusticia
que revienta heridas mal cerradas
por las que afloran las vísceras
y se transforman en pústulas del aliento,
de la carne y de la ardiente memoria.
En mis refugios destruidos
ResponderEliminaren mis faros sin luz
en el muro de mi tedio
escribo tu nombre.
Libertad.
Paul Eluard
Una vez más escribiste un poema…
Saludos
Excelsa tu poesía maestro..
ResponderEliminarExcelente
¨Hermoso cuando la poesía es todo en el sentir.. nace con amor la lectura..¨ Payés
Un abrazo
Saludos fraternos..
Hermoso blog, pasaré pronto para disfrutarlo bien. Saludos!
ResponderEliminarcuando afloran esos recuerdos de guerras y triaciones entonces pienso una cosa: el ser humano es malo, taimado e inmisericorde.
ResponderEliminarSaludos.
Como me duele, cuando enmudecen los pájaros
ResponderEliminary los caminos se plagan de ortigas.
Que pena que eso nos separe aún más de los que estuvieron.
Maldito el hombre que al hombre mata. Maldito el que por su culpa se escriben historias asesinas; esa historia que no deja vivir.
ResponderEliminarRecordar para olvidar... Recordar para que nunca vuelva a pasar.
Abrazos
Para eso debe servir el poeta, para denunciar con sus versos y poesía, como tú muy bien lo haces, las injusticias de la humanidad, la depredación del hombre, las cruentas guerras y ese "Homo homini lupus" al que se refiriera Tito Marcio.
ResponderEliminarUn abrazo.
bonito poema, si señor.
ResponderEliminarCierto Noray, sorprende como el hombre es capaz de lo mejor y de lo peor, pero cuando sale su lado salvaje, animal...es lo peor, como dice Terly, "el hombre es un lobo para el hombre".
ResponderEliminarEstremecedor poema.
Un abrazo y que tengas un buen fin de semana.
Los valientes siempre dieron su vida Noray.
ResponderEliminarTantos se fueron y tantos estamos.
La maldad es ignorancia.
La compasión y el Amor es el estandarte y el escudo de los valientes.
Un abrazo
Asesinados...
ResponderEliminarentre una sementera de versos
que nunca llegaron a florecer.
Truncados por manos
infames que no saben
del vuelo de la mariposa
ni del canto del ruiseñor.
Tu versar siempre cierto
siempre bello.
Un cálido abrazo.