Haiku perfecto, cargado de dolor y de odio, en tan pocas palabras. Me llamó la atención la cita de Bachelet al costado, una de las pocas políticas decentes que nos quedan en latinoamérica... Cariños!
Bello homenaje a un hombre con el alma muy grande, quedan sus versos, su voz y sus ideas. Los que quisieron callarlo no se imaginaron que su voz quedo sembrada en el mundo.
Matar poetas,es temer a la palabra y el sentimiento.
ResponderEliminarNadie,que es capaz de matar un poeta, tiene o puede, decir nada importantey bueno.
Precioso Haiku, y precioso post.
Un beso desd lapalabra
Haiku perfecto, cargado de dolor y de odio, en tan pocas palabras.
ResponderEliminarMe llamó la atención la cita de Bachelet al costado, una de las pocas políticas decentes que nos quedan en latinoamérica...
Cariños!
Bello homenaje a un hombre con el alma muy grande, quedan sus versos, su voz y sus ideas. Los que quisieron callarlo no se imaginaron que su voz quedo sembrada en el mundo.
ResponderEliminarSaludos.
A los poetas nos callan de muchas maneras. El exilio, la muerte física, el silencio, pero nunca podrán con la poesía. Un abrazo.
ResponderEliminarSu voz seguirá
ResponderEliminaroyéndose.
Un buen homenaje de
haiku.
Un abrazo.
¿Qué hay de malo en la palabra? ¿No es, acaso, lo que siempre ha unido al hombre?
ResponderEliminarSiempre el fusil desarmando.
Un abrazo, poeta.
las 17 sílabas perfectas... El sentido grandioso.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
Merecido homenaje a un gran poeta y hombre valiente.
ResponderEliminar