lunes, 10 de noviembre de 2008

Las últimas horas del día

Cor, Tempo, humor e movimento, 2002 - ARMANDO AGUIAR

Es domingo, atardeciendo.
Miro tras el cristal de mi ventana
y no veo nada.

Todo es un gran puzzle
a medio hacer y sin futuro.
Hay demasiadas piezas
y muy poca paciencia,
escasas soluciones
y demasiado hastío.

Es domingo, atardeciendo.
El aire empuja las nubes suavemente,
desplegando en silencio 
el color de la noche.

Allá, a lo lejos, veo otra ventana oscura
y detrás, en la penumbra,
a otro ser humano pasando las últimas horas del día,
saciado de rutina, de rabia contenida
y de profundo silencio.